Este sábado, en un nuevo capítulo de “Socios de la parrilla”, Pancho Saavedra, Jorge Zabaleta y Pedro Ruminot recibieron en su quincho a los comediantes Alejandro Barros, Tomás Leiva y Edo Caroe.
Y fue este último quien sorprendió al contar por qué dejó de estudiar Derecho, una carrera que le gustaba y en la que le iba bien. “Yo fracasé miserablemente”, comentó en alusión a sus deseos de convertirse en abogado.
Fueron tres años los que Edo Caroe cursó la carrera, siendo en el último cuando descubrió la magia y la comedia. “Estaba todo el tiempo pensando en actuar”, reconoció el comediante.
“O sea, yo estaba en clases y escribía chistes, escribía mis rutinas de magia, ya mi cabeza no estaba ahí y tuve que tomar una decisión. Yo ya estaba casado y con una hija, entonces decidí dejar la universidad y todas mis cartas las aposté al escenario. Fueron años difíciles, pero se logró”, agregó Edo Caroe en el espacio de Canal 13.
Pero el comediante también confesó que, previa a esa experiencia, jugó un tiempo como arquero en Santos, equipo de Temuco donde comenzó su carrera Marcelo Salas.
El presente de Edo Caroe
En la actualidad, Edo Caroe lidera un podcast junto a Alejandro Barros y Tomás Leiva, quienes son amigos desde hace más de 20 años. En este podcast ,“Tomás va a morir”, los tres humoristas comparten sus anécdotas y experiencias a través de entretenidas conversaciones.
El podcast, que se transmite por YouTube y va en su sexta temporada, debe su nombre a una infarto que sufrió Tomás Leiva y que puso en riesgo su vida.
“No teníamos muy claro qué íbamos a hacer, simplemente queríamos hablar, pero nos dimos cuenta que ninguno de los dos (Caroe y Leiva) tenía contenido serio. Entonces, ahí entró el señor archivista Barros que venía a poner la cuota de seriedad, él entregaba los datos importantes”, relató Edo Caroe en “Socios de la Parrilla”.
Por estos días, Edo Caroe es uno de los comediante más importantes de Chile, quien logró repletar dos Movistar Arena en mayo del 2023. De hecho, convocó a 12 mil personas en cada función, vendiéndose las entradas para el primer show en 40 minutos y para la segunda, en media hora.