La hija de Adamari Lopez y Toni Costa, Alaïa, disfruta de unas divertidas vacaciones en España junto a su papá, quien ha publicado cada momento del viaje. Un fin de semana antes de la aventura a Europa la joven de ocho años pasó un agradable fin de semana en compañía de su mamá.
A pesar de que la actriz de telenovelas como “Amigas y rivales” y el bailarín de zumba se separaron hace dos años han logrado mantener una buena relación por el bien de su retoño. Incluso sus seguidores les han aplaudido en redes sociales que puedan dejar de lado sus diferencias para poder darle una buena crianza a la pequeña.
Toni Costa y Alaïa disfrutan de unas divertidas vacaciones al extremo en España
Mientras Adamari Lopez regresó a su tierra natal, Puerto Rico, para relajarse unos días y visitar a su familia, Toni Costa se llevó a su hija al país donde él nació. Alaïa pudo reunirse después de varios meses con sus seres queridos por parte de su papá como su abuelita, bisabuela, tíos y primos.
Antes de su llegada a España, Toni Costa y Alaïa visitaron El Salvador donde se aventuraron en un deporte extremo acuático, algo que el bailarín de zumba aseguró que era para fortalecer la confianza de su hija: “La seguridad y confianza con la que crece Alaïa empieza por dársela constantemente, enseñándole que ella cuidándose puede con todo, feliz de verla tan decidida y segura, eres la mejor”, escribió en su cuenta oficial de Instagram.
Días después el exnovio de Adamari Lopez compartió su llegada a España y a través de sus historias de Instagram Toni Costa ha compartido las actividades que ha hecho con su hija durante su estadía en España como jugar futbol y su reencuentro con sus seres queridos. “Con mi bisabuela Goya, te amamos mucho y nos hace inmensamente felices verte ye star contigo cuando venimos a España”, se lee en una publicación compartida en los perfiles de padre e hija.
Toni Costa también llevó a su mamá e hija de comprar a un centro comercial de Valencia donde presumió su habilidad para hablar valenciano. El bailarín de zumba animó a su hija a intentarlo, pero se mostró tímida y se negó a decir las palabras a las que le animaban su papá y abuela.