El 25 de marzo será recordado como un día de luto en el mundo de la música. El baterista de la banda estadounidense Taylor Hawkins fue encontrado muerto en un hotel en Bogotá, Colombia. Los Foo Fighters cancelaron sus presentación en el Festival Estéreo Picnic, donde estaban programados para cerrar la jornada.
Junto con Dave Grohl, Taylor fue uno de los integrantes más importantes de la banda. Pero cómo inició su carrera en la industria musical? Taylor Hawkins nació el 17 de febrero de 1972 en Forth Worth, Texas. Desde niño se mudó a California junto a su familia y a partir de esa edad, demostró interés por la música.
Estudió y acabó una carrera de conservatorio en percusión clásica, pero su pasión fue más allá y aprendió a tocar otros instrumentos como la guitarra y el piano, sin embargo la bateria siempre fue lo suyo y a lo largo de su carrera artística lo demostró.
Hawkins y su camino en el rock.
Influenciado por leyendas de la bataca como John Bonham, Stewart Copeland y Roger Taylor, el músico comenzó a tocar desde muy joven en bandas locales, pero la primera en la que realmente destacó fue en Sylvia, agrupación en la que componía y tocaba la batería junto a unos amigos. Su talento era tal que comenzaron a llegarle ofertas de otros grupos y artista.
De Alanis Morissette a los Foo Fighters
Su calidad y técnica, que le otorgaron una gran reputación, le permitieron llegar a tocar con Alanis Morissette con la banda Sexual Chocolate. Taylor acompañó a la cantante en la gira de promoción del disco "Jagged Little Pill".
Después de esa etapa, emprendió el camino más importante de toda su trayectoria: integrarse a los Foo Fighters. En 1996, Dave Grohl tuvo problemas con el baterista anterior y contactó a Taylor Hawkins para pedirle que le recomendara a alguien.
Dave se llevó una gran sorpresa, cuando el propio Hawkins se ofreció para ser el baterista de su banda, y sin duda fue una gran oferta, pues llegó justo a tiempo para integrarse al tour que tenían previsto para presentar "The Colour and The Shape", el segundo álbum de la banda.
A partir de ese momento, se convirtió en miembro oficial de la agrupación y con ellos, grabó ocho discos de estudio, el último de ellos “Medicine at Midnight”, varios EP’s y un sinfín de conciertos junto a Grohl, Pat Smear, Nate Mendel, Chris Shiflett, Rami Jaffee, William Goldsmith y Franz Stahl.
El trabajo de Taylor Hawkins dentro de los Foo Fighters no se limitó a tocar la batería. Su voz se puede escuchar totalmente en temas como "Cold Day in the Sun", "Have a Cigar" (cover de Pink Floyd) y "Life of Illusion".
Además, en las presentaciones en vivo de la agrupación, hacía coros y además intercambiaba lugares con Dave Grohl para interpretar covers como "Rock & Roll" de Led Zeppelin y "Somebody to Love" de Queen, entre otros.
Su talento fuera de la batería
A la par de tocar la batería para Foo Fighters, también tuvo otros proyectos interesantes. Antes de las grabaciones de "One by One", Taylor grabó por su cuenta algunas canciones en el estudio de un amigo. El resultado de todo esto fue "Taylor Hawkins and the Coattail Riders", un grupo que formó junto a otros músicos como Chris Channey y Gannim.
En 2010, publicaron su segundo material discográfico titulado "Red Light Fever", un álbum donde Hawkins mostró sus influencias musicales. En la grabación participaron el mismisimo Roger Taylor y Brian May de Queen, así como Dave Grohl. Pero fue hasta 2019 cuando Hawkins estrenó "Get The Money", la tercera placa de ese proyecto, una colección de temas, donde le rinde tributo al rock.
Además de ese proyecto, Taylor Hawkins también estrenó en 2016 un EP en solitario llamado "Kota", en el que muestra su lado más personal. También colaboró tocando la batería para muchos artistas, entre ellos Coheed and Cambria, Slash y Ozzy Osbourne. También demostró sus dotes actorales, al interpretar a "Iggy Pop" en una película sobre el mítico "CBGB".
