Los seguidores de la serie "El juego del calamar" supieron desde finales de 2021 que la exitosa producción tendrá una segunda temporada, noticia que fue confirmada hace unos días con el lanzamiento del corto pero miedoso teaser que le da comienzo a esta nueva ronda del juego.
Con dicho teaser se mostró una carta firmada por su creador Hwang Dong-hyuk quien aseguró que: "aunque tardamos 12 años para dar vida a la primera temporada de 'El juego del calamar', solo se necesitaron 12 días para que se convirtiera en la serie de Netflix más popular de la historia".
Sin duda, ésta es una serie que ha roto récords de visualización en la plataforma y una sensación a nivel mundial tras el lanzamiento de su primera temporada. La historia que fascinó en cada punto del planeta, ahora se supera a sí misma con el anuncio de la realización de un reality show llamado "Squid Game: The Challenge" (El juego del calamar: El desafío).
La compañía de streaming aseguró en su blog que el programa entregará un premio multimillonario que ascenderá a los 4.56 millones de dólares. Los participantes serán 456, el mismo número de jugadores de la serie que contarán con nuevos juegos.
¿Cómo postularse para participar en “El juego del calamar”
Si consideras que sabes el juego de "Luz roja, luz verde" o que recreas figuritas con azúcar derretida puedes postularte al programa en la página SquidGameCasting.com.
Es requisito hablar inglés, tener disponibles 4 semanas a inicios de 2023, contar con un pasaporte para viajar por los lugares en los que se grabará la competencia, tener más de 21 años al enviar la aplicación y grabar un video de 1 minuto describiendo un plan de juego para unirse a lo que describe Netflix como el "experimento social más grande" de la compañía de streaming.
Serán 10 episodios en la que la producción no solo traerá toda la tensión de la serie sino otros juegos que serán sorpresa para los participantes, pero, no hay por qué preocuparse, si al final algún jugador pierde no será como en la serie, tan solo podrán volver a casa. Eso sí, con las manos vacías.
