En el capítulo final de la primera temporada de "House of the dragon", los Targaryen Vs. los Hightower se enfrentan por el poder y cada vez es mayor la posibilidad de una guerra.
Un final épico que dio inicio a la Danza de Dragones, en donde los Targaryen, por mucho que lo evitaron, se tendrán que enfrentar a sus contrincantes por el derecho al trono.
*Alerta Spoiler*: Con el nombre "The Black Queen", este fue un capítulo cargado de dolor. Rhaenyra al enterarse de la muerte de su padre y de la traición de los Hightowers con la coronación, entra en trabajo de parto prematuro y pierde a su bebé Visenya, quien nace sin vida, como un presagio a lo que está por venir.
Rhaenyra Targaryen no se deja llevar por la ira sino que, en honor a su padre, busca mantener el reino unido. Sin embargo, su esposo Daemon, tiene otros planes y quiere, sin duda alguna, comenzar las confrontaciones bélicas para retomar el poder del trono.
En la búsqueda de aliados y contrincantes pasa un capítulo en el que, a pesar de no quererlo, se comienza a tejer el odio entre las familias, las alianzas y las traiciones.
Lucerys Velaryon va en calidad de mensajero al Bastión de las Tormentas, fortaleza de la Casa Baratheon, para convencer a Lord Borros de apoyar el reinado de su madre. No contaba con que Vhagar y Aemond Targaryen ya estaban allí.
Lucerys se marchó de inmediato en su dragón, Arrax, quien estaba agitado por la tormenta eléctrica que había.
Aemond lo siguió en su dragón y empezó una tensa persecución y aunque Lucerys logra eludirlos inteligentemente, Arrax ya se había puesto muy nervioso por toda la situación, al ser un dragón joven no hizo caso a su dueño y atacó a la bestia de Aemond.
Esto también descontroló a Vhagar, quien empezó a perseguir a Arrax nuevamente y por su tamaño devora de una sola mordida al niño y al dragón.
Después del doloroso y sorpresivo momento, Daemon Targaryen le cuenta a la reina el momento de la muerte de su hijo, por lo que ella cargada de dolor y de odio mira a la cámara, lo que indicaría que el momento de la paz pasó.
