Recientemente en TiempoX te compartimos que el experto en la realeza británica, Robert Jobson, sostuvo que Kate Middleton se quedó sin dar el último adiós a la reina Isabel II para que Meghan Markle no acudiera a Balmoral en los últimos momentos de vida de la monarca, por lo que nos dimos a la tardea de hacer un recuento de todos los momentos tensos que han ocurrido durante estos años entre las cuñadas.
Recordemos que al principio de su relación ambas parecieron caerse muy bien y tener una relación cercana, lo cierto es que la norteamericana y la británica son muy diferentes y esto ha marcado su relación desde el principio.
La esposa del príncipe Harry habló en el documental biográfico de Netflix, “Harry y Meghan”, sobre el primer encuentro con la princesa de Gales y recordaba que ella estaba con unos vaqueros rotos y descalza, y es una gran abrazadora, pero notó a Kate mucho más formal.
Fue la propia Meghan la que aseguraba que William y Kate habían ido a cenar a su casa y no se dio cuenta de que ser tan natural podía ser algo que sorprendiera a los británicos.
Al terminar la velada, la norteamericana afirmó que sintió que ya podía relajarse porque le “sorprendió” aquella formalidad. Sin embargo, antes de la boda de Markle con el príncipe Harry en 2018, las cuñadas tuvieron una buena época e incluso Kate se ofreció para ayudar a la exactriz “si alguna vez necesitaba algo”.
La princesa de Gales recibió a la californiana como “una bocana de aire fresco”, pero pronto la relación se fue enfriando debido a que no tenían demasiado en común.
Kate Middleton no se sintió bien, según cuenta Harry en su libro ‘Spare’, con la atención mediática recibida por Meghan Markle, con quien parecía estar “obligada a competir”.
El duque de Sussex cuenta un primer encontronazo entre ambas cuando la princesa de Gales “hizo una mueca” cuando la norteamericana le pidió un poco de brillo labial en su primer evento juntos los cuatro en el Royal Foundation Forum, en febrero de 2018.
Esto comenzó a crear una brecha entre ambas, que se recrudecía por la intromisión de la prensa, que se percató de la tensión entre ellas. Una tensión que volvió a saltar cuando Kate estaba embarazada de su tercer hijo y Markle afirmó que tenía un “cerebro de bebé” debido a las hormonas.
Harry explica en su libro de memorias que los cuatro se reunieron para tomar el té en el palacio de Kensington en junio de 2018 para reconciliarse, pero que entonces la princesa de Gales le recriminó a Meghan que no tenían la suficiente confianza para que su cuñada hablara de sus hormonas.
Para rematar, la boda fue la siguiente ocasión en la que ambas cuñadas tuvieron un rifirrafe, pues el vestido de dama de honor de la princesa Charlotte fue el motivo que llevó, en mayo de 2018, a que ambas acabaran con algunos mensajes que las hicieron llorar.
Recordemos que de este hecho han circulado varias versiones, porque al principio se filtró que Meghan hizo llorar a Kate y la exactriz le contó a Oprah Winfrey que la que acabó llorando fue ella, un hecho que confirmó Harry. Kate llegó a disculparse, pero la relación entre ambas quedó tocada.
La relación entre ambas a día de hoy es prácticamente nula y aunque han coincidido en el Jubileo de Platino de la reina Isabel II y posteriormente en su funeral, han tratado de evitar la foto juntas y su lenguaje no verbal revela que ambas se sienten incómodas en la presencia de la otra.