A pesar de que fueron invitados en febrero, aún no hay respuesta del príncipe Harry y Meghan Markle sobre su presencia en la coronación del rey Carlos III. Una situación que afecta directamente a sus hijo, Lilibet y Archie, ya que el Palacio de Buckingham está esperando su confirmación para incluir a los jóvenes príncipes en las actividades del evento.
Todo ocurrió en un mismo fin de semana: mientras Lilibet era bautizada en secreto en Los Angeles, EEUU, se dio a conocer que tanto la hija mas joven de los duques de Sussex y su hermano le fueron otorgados los títulos reales de princesa y príncipe, respectivamente. En paralelo, se confirmó que el príncipe Harry y Meghan Markle habían recibido una invitación formal del rey Carlos III a su coronación.
De esta manera, la Familia Real puso fin a las especulaciones sobre la posibilidad de que la pareja no fuera considerada para la importante ceremonia y dejó la decisión en manos de el hermano del príncipe William y su señora. En aquel momento, el portavoz dijo que "no revelaremos una decisión inmediata sobre si el duque y la duquesa asistirán en este momento". De esto depende qué roles cumplirán Lilibet y Archie en la coronación del rey Carlos III.
El ro lde Lilibet y Archie está por definirse
Según una fuente real, los funcionarios están a la espera de que el príncipe Harry y Meghan Markle confirmen su presencia y al de sus hijos en el evento que se realizará en mayo en la Abadía de Westminster. Una vez conocida la decisión, se trabajará en el papel que los jóvenes príncipes cumplan ese fin de semana.
Todo en medio de rumores que plantean que el príncipe Archie no habría sido invitado, ya que en el día de la coronación, cumple cuatro años de edad. A esto se le suma la presión que generó la filtración del importante rol que cumplirán los hijos de los príncipes de Gales, George, Charlotte y Louis.
Los tres príncipes jugaran un papel clave en el importante fin de semana de su abuelo, ya que, según reveló The Times, ellos se unirían a sus padres en un carruaje después del final del servicio en la abadía de Londres, el que se realizará el próximo 6 de mayo.
A su vez, se filtró que los duques de Sussex habría exigido que Lilibet y Archie sean tratados como los hijos del príncipe William y Kate Middleton, por lo que esperan que debiesen ser incluidos junto al resto de la familia real en el saludo oficial de los miembros activos de la monarquía británica en el balcón.
