Miguel Bosé ha tomado una de las decisiones más drásticas al deshacerse de su único patrimonio familiar que le quedaba en su natal España. Y es que, su casa de Somosaguas fue vendida al portero del Real Madrid Thibaut Courotis, luego de que se dio a conocer que el cantante se encuentra en una lista de morosos deudores de la agencia Tributaria.
Según se ha revelado el intérprete de “Linda” cerró la transacción de venta el pasado 25 de octubre del 2022. La propiedad está valorada en más de 6 millones de euros.
Esta decisión no ha sido fácil para el intérprete a quién los problemas de liquidez lo han llevado hasta este punto según información de la revista Semana. El cantante dejó su casa como una garantía y lo hizo con una hipoteca unilateral a favor de la Agencia tributaria; dicha propuesta fue aceptada.
Esta medida la realizan los que no tienen suficiente liquidez, pero sí propiedades para responder ante el organismo, un movimiento que sin duda le dio un respiro.
Esta residencia ha sido de su familia, comprada por sus padres, Luis Miguel Dominguín y Lucía Bosé. Fue construida en 1966 y remodelada bajo petición de Bosé en el 2010, para vivir con su ex pareja Nacho Palau y sus hijos.
La mansión tiene mil metros cuadrados construidos y 10 mil exteriores, un gallinero y unos ventanales que dejan entrar la luz natural. Está fabricada de hormigón, con espectro frío. Además de que cuenta con un taller de cerámica, dos piscinas. La casa se compone de dos pisos, en el primero está el hall, el salón, comedor, un aseo, la despensa, lavandería, un sauna y un gimnasio. En la planta de arriba hay dos apartamentos independientes con baño y vestidos propio.