La princesa Iman, la segunda hija de los reyes Abdalá y Rania de Jordania, se casó con Jameel Alexander Thermiotis, en una ceremonia celebrada ante 150 invitados en el palacio de Beit Al Urdun, la residencia de sus padres, decorada especialmente con flores y todo tipo de detalles por la empresa jordana ADegrees.
A su llegada se pudo apreciar su espectacular vestido de novia de inspiración medieval, uno de los secretos mejor guardados de Iman para este día. El vestido elegido por la princesa es un diseño minimalista de color blanco, manga larga, con falda de silueta 'A' y una cola de tamaño medio que nace de la cintura.
Lo que más llamó la atención fue la parte superior del vestido, pues está confeccionada con un delicado encaje semitransparente con con ligeros bordados de motivos florales y cuello perkins, que crea la sensación de estar ante un escote palabra de honor, un efecto óptico que estiliza la figura.
Ese mismo encaje se encontraba en el puño de las mangas, con blonda al final. El resto del vestido era totalmente liso y de líneas depuradas, terminado en una pequeña cola. Hasta el momento, se desconoce la firma del diseño, aunque recuerda al Valentino que llevó Marie-Chantal Miller en su enlace con Pablo de Grecia.
Su tiara nueva y el resto de sus accesorios
Iman complementó su vestido con un maravilloso velo bordado, que se extiende a lo largo de toda la cola del vestido y un ramo de flores blanco. "La flor blanca en un ramo es un diseño que no va a pasar de moda. Es atemporal, clásico, y hace que, quien pueda ver las imágenes de la boda años más tarde, las admire y las use como referencia", explica Lindsay y Alex, de la floristería Savia Bruta a la revista Hola.
La princesa Iman lució su cabello recogido con dos mechones sueltos bordeando su rostro y coronó su cabeza con una nueva tiara. Aunque la reina Rania guarda algunas coronas y tiaras en su joyero que podría haber utilizado su hija, Iman optó por una diadema de diamantes de estilo fringe que sujetó el velo, lleno de encaje y de motivos florales.
Al igual que sucede con el vestido, por el momento es una incógnita su procedencia, al igual que los pendientes largos de diamantes que lució.
La princesa Iman llegó del brazo de su hermano y heredero al trono, Hussein. Mira aquí el emotivo momento:
