Julián Gil una vez más mostró su lado sensible al hablar del conflicto que mantiene con su ex pareja, Marjorie de Souza, quien no le permite ver a su hijo Matías, desde hace cinco años
Fue en el programa “Siéntese quien pueda” que conduce el actor argentino, donde luego de pasar al aire una entrevista que le hicieron a la actriz venezolana en la que se negó a hablar de las razones por las que no quiere que su hijo conviva con su padre, Julián Gil aprovechó el espacio y con la voz entrecortada le pidió a Marjorie que reconsiderara su decisión.
"Te suplico, te imploro, ya no sé cómo pedirte que me dejes estar en la vida de mi hijo. Matías me merece a mí, a sus hermanos y sus tías. Creo que lo estás privando de uno de los derechos más lindos que tiene el ser humano que es tener una familia”, dijo el actor de 52 años con la voz entrecortada.
Julián Gil lamentó que Marjorie de Souza siga empeñada en no querer hablar del tema con la prensa, asegurando que su hijo no tiene papá cuando él siempre ha tenido deseos de estar con él y ser testigo de su crecimiento.
“Es una mezcla de sentimientos, llevo meses escuchando el soy una dama y no quiero hablar de esto, creo que se le está faltando respeto al niño, sobre todo a las cosas, a mí como papá y al público que de cierta manera la apoyo a ella”, mencionó.
“Me preguntó si el nene le pregunta: '¿Cómo está? ¿Quién es mi papá? ¿Qué hace mi papá? Quiero conocer a papá'. ¿Qué le dices al niño? Soy una dama y no puedo hablar”, concluyó.
Al momento, Marjorie de Souza no ha respondido a las peticiones del actor, quien recientemente se comprometió con su novia, la periodista deportiva, Valeria Marín, después de tres años de noviazgo.
¿Qué pasó con Julián Gil y Marjorie de Souza?
Julián Gil y Marjorie de Souza iniciaron un romance en el 2014. Dos años más tarde se convirtieron en padres de un niño. Sin embargo, sus diferencias terminarían por arruinar su relación y con ello iniciaron en el 2017 una dura batalla legal para definir la custodia del pequeño.
Finalmente, tres años después, en el 2020, la actriz venezolana consiguió la patria potestad de su hijo, un derecho que le permite negarle al menor la posibilidad de conocer a su papá.