JK Rowling, la célebre autora de la saga de libros de "Harry Potter", reveló en el podcast de tres episodios "The Witch Trials of JK Rowling", que su exesposo mantuvo retenido el manuscrito de su primera novela de Harry Potter para evitar que lo dejara.
Rowling dijo que le preocupaba que el reportero de televisión portugués Jorge Arantes, con quien estuvo casada un año, destruyera su trabajo, por lo que tomaba en secreto páginas del libro para fotocopiarlas.
"El matrimonio se había vuelto muy violento y muy controlador... Vivía en un estado de tensión horrible porque tenía que actuar como si no pensara irme, y no creo que fuera una muy buena actriz. Esa es una forma terrible de vivir y, sin embargo, el manuscrito siguió creciendo, yo había seguido escribiendo".
Rowling, de 57 años, comenzó a escribir lo que más tarde se convertiría en "Harry Potter y la piedra filosofal" después de tener la idea de la serie de libros en un tren retrasado de Manchester a Londres en 1990.
"[Arantes] sabía lo que significaba para mí ese manuscrito porque en un momento tomó el manuscrito y lo escondió. Ese era su rehén. Cuando me di cuenta de que definitivamente me iba a ir, llevaba algunas páginas del manuscrito al trabajo todos los días, solo unas pocas para que no se diera cuenta de que faltaba algo, y lo fotocopiaba".
Añadió: "Ese manuscrito significó mucho para mí y fue lo que prioricé guardar. Lo único que prioricé más allá de eso fue mi hija, pero en ese momento ella todavía estaba dentro de mí, por lo que estaba lo más segura posible en esa situación".
Rowling dio a conocer el pasado violento con su esposo en 2020. Cuando Arantes fue cuestionado por reporteros, admitió que la había abofeteado "muy fuerte" y dijo que "no lo lamentaba".
Al describir la noche en que abandonó a su esposo, Rowling dijo: "Llegó una noche en la que se enojó mucho conmigo y me quebré y dije 'Quiero irme'. Se puso muy violento y me dijo: 'Puedes irte, pero no te vas a quedar a Jessica, me la quedo, la esconderé'.
"Así que peleé y pagué el precio. Hubo una escena violenta que terminó conmigo tirada en la calle".
Rowling terminó el libro mientras ya vivía en su casa de Edimburgo con las subvenciones estatales como madre soltera.
El manuscrito fue rechazado por varios editores hasta que Bloomsbury se comprometió a producir inicialmente 500 copias, y el primer libro se publicó en 1997 con un éxito de ventas inusitado.