Meghan Markle y el príncipe Harry tuvieron que seguir estrictas reglas desde su primera cita hasta el día que decidieron renunciar a ser miembros activos de la familia real. A pesar de que los duques de Sussex hablaron mucho sobre sus primeros encuentros en "Harry & Meghan", no mencionaron las impactantes restricciones y límites que tuvieron para poder verse esa primera vez.
El pasado 8 de diciembre se estrenó la primera parte del documental original de Netflix en el que los duques de Sussex cuentan su verdadera historia. A través de esta docuserie de dos partes y seis episodios en total, Meghan Markle y el príncipe Harry recuerdan cómo fue renunciar a sus labores reales y ponen un alto a las especulaciones sobre su relación con la familia real.
Así fue la primera cita de Meghan Markle y el príncipe Harry
En el primer episodio de "Harry & Meghan" los duques de Sussex recuerdan cómo se conocieron y admiten que el pelirrojo royal estuvo interesado primero en ella al verla en Instagram en un video donde aparece con una amiga en común de ambos. Después de eso, le hijo menor del rey Carlos III preguntó por ella hasta que tuvo su número y comenzaron a platicar.
Tras pasar días hablando a través de mensajes y llamadas, Meghan Markle y el príncipe Harry decidieron tener su primera cita. "Nos encontramos en el 76 de Dean Streat. ¡Llegaste tarde!", recordó la duquesa de Sussex, quien llegó a pensar que "era uno de esos chicos", por lo que estuvo a punto de irse.
Sin embargo, el príncipe Harry mandó varios mensajes a Meghan Markle disculpándose por el tráfico y aunque en un principio la ex actriz no le creyó, su perspectiva cambió cuando lo vio llegar. "Estaba desesperado, como loco, sudando", confesó el duque de Sussex sobre cómo llegó a ver a su futura esposa por primera vez.
Estas son las estrictas reglas que Meghan Markle y el príncipe Harry tuvieron que seguir en su primera cita
A pesar de que Meghan Markle no mencionó el nombre del lugar donde tuvieron su primera cita, sí dijo la dirección y se trata del club privado Soho House. El restaurantero Nick Jones fue el fundador del punto de reunión exclusivo para socios y cuya membresía va desde 1000 libras al año y 1500 libras para el acceso a todas las "casas" alrededor del mundo como Soho House Barcelona o Nueva York.
Tan exclusivo como Soho House es, tiene sus propias y muy estrictas reglas que cada miembro debe cumplir, sin importar si eres miembro de la realeza o no. Es por eso que Meghan Markle y el príncipe Harry se enfrentaron a estas restricciones cuando se encontraron por primera vez,
El lugar se ha autodenominado como "destinado a aquellos en la industria creativa y personas con un alma creativa". Es por eso que seguir con la etiqueta del lugar es uno de los principales requerimientos, pues "los miembros deben abstenerse de recibir invitados corporativos y usar atuendo corporativo en la 'casa'".
Soho House también una política de privacidad muy estricta que dicta que "los miembros y sus invitados no deben acercarse, molestar o solicitar a otras personas en sus 'casas' que no conozcan personalmente". Si alguno de los socios del club rompe esta regla puede ser suspendido o retirar su membresía.
El uso de celular, así como tomar fotografías o videos, también está estrictamente prohibido, ya que Soho House busca "proteger la atmósfera relajada dentro de las 'casas', por lo que los miembros no pueden recibir ni hacer llamadas, y los celulares deberán permanecer en modo silencio. Se permite enviar mensajes de texto y se pueden hacer llamadas en áreas designadas".
"No se pueden usar cámaras u otros dispositivos de grabación, ya sea de transmisión en vivo, un teléfono móvil u otro medio, mientras se encuentre en la 'casa'". Sin embargo, Meghan Markle y el príncipe Harry rompieron esta reglar, pues en su documental compartieron una fotografía que se tomaron dentro del lugar.
