Con la llegada de 2023, las realeza europea y sus integrantes se alistan para distintos actos en los que sacarán de los joyeros reales las colecciones de tiaras. Actos como la coronación del rey Carlos III, las bodas de la princesa Iman, la hija mayor de la reina Rania de Jordania y de la princesa Alexandra de Luxemburgo; la del príncipe heredero Hussein con la saudita Rajwa al-Saif regalarán a los fans de la realeza grandes postales de sus piezas de joyería.
Al menos en esos actos que se tienen previstos a lo largo del año, se espera un despliegue de brillo de los diamantes e impresionantes piedras preciosas de distintos colores en las tiaras de los integrantes de la realeza.
Las royals las usan el día de su boda y en las ceremonias que el protocolo así lo requiera. Esas joyas habitualmente. En los joyeros de todas las casas reales europeas se guardan estas importantes piezas. En TiempoX te damos todos los detalles de quién tiene la colección más costosa.
El portal británico sobre comparativas de precios money.co.uk pidió a los joyeros de la firma de expertos en diamantes Steven Stone analizar las joyas de ocho familias reales europeas europeas y las tiaras que usaron sus integrantes en las tres bodas reales más recientes del último siglo.
El análisis se llevó a cabo con el objetivo de calcular lo que cada casa real gastaría en asegurar las piezas teniendo en cuenta la edad del propietario, el material utilizado y el costo de fabricación estimado de la tiara.
Las tiaras más costosas
De acuerdo a esa investigación, las colecciones de tiaras más caras le pertenecen a la monarquía británica y la holandesa. Ambas casas reales comparten el primer puesto de la lista con sus colecciones de diademas con un valor estimado de 17 millones libras, es decir unos 20.5 millones de dólares cada una.
La colección de la familia real británica, que pertenecía a la reina Isabel II y ahora es propiedad de Carlos III, incluye las tiaras de boda usadas por las últimas tres novias reales de la familia Windsor: la tiara Fringe de la reina María, que lució la princesa Beatriz,, la tiara Greville Emerald Kokoshnik, que llevó la princesa Eugenia, y la tiara Bandeau de la reina María que escogió Meghan Markle. Muchas de estas piezas, como se puede deducir de los nombres, fueron heredadas a través de su abuela paterna, la reina María.
Por su parte, las joyas analizadas de la colección de la casa de Orange de la familia real holandesa, incluye las tiaras de matrimonio de tres novias reales recientes: la tiara de Estrellas, que usó la reina Máxima; la tiara Württemberg de la reina Beatriz y la Rose Cut Diamond Bandeau de la reina Juliana.
La siguiente familia real en la lista es la de Noruega, cuya colección estaría valuada en este portal en 15,5 millones de libras, casi 19 millones de dólares. En el joyero, la tiara más costosa, con un valor estimado de poco más de 12 millones de dólares, es la de diamantes que llevó la reina Maud para su boda con Haakon VII en 1896 y recuperada por la princesa Marta Luisa para casarse con el escritor Ari Behn. Mette-Marit la llevó a la boda de la princesa Victoria de Suecia en junio de 2010.
Después de la de Noruega, están las colecciones de tiaras de Noruega, Dinamarca, Bélgica y España. Bélgica se sitúa por encima de España debido a una tiara que le regaló Franco a Fabiola de Mora y Aragón por su boda con el rey Balduino de los belgas el 15 de diciembre de 1960.
El tocado tiene rubíes, esmeraldas y aguamarinas intercambiables que le llevó la propia Carmen Polo a la española que se convertiría en reina. Fabiola usó la tiara en una gala en la víspera de la boda y muchas otras veces después de todas las maneras que la versátil joya permitía: intercambiando las piedras, como diadema e incluso como gargantilla.
Sobre la impresionante joya circularon distintos rumores, como que había adornado la imagen de una virgen o que las piedras eran falsas, algo que no contemplan, pues los joyeros valuaron la pieza en cinco millones de libras (poco más de seis millones de euros).
La colección de tiaras de España
Las tres tiaras usadas en las tres últimas bodas de la familia real colocarían a España en el sexto lugar de esta investigación, seguida de Suecia y Liechtenstein. Las joyas de la Casa Real tendrían un valor de 7.5 millones de libras, unos ocho millones de dólares. La tiara más valiosa está valuada en 3.6 millones de libras, es la que llevó la infanta Elena para dar el "sí, acepto" a Jaime de Marichalar el 18 de marzo de 1995.
La Tiara Marichalar, una joya de platino y diamantes de diseño helénico que, según se publicó entonces, la familia de Jaime de Marichalar le había regalado tras la pedida de mano. Continúa perteneciendo a la infanta a pesar de su divorcio en 2009. De hecho, la llevó un año después para asistir a la boda de la princesa Victoria de Suecia.
La tiara de flor de lis, regalo de Alfonso XIII a la reina Victoria Eugenia por su boda en 1906, es la segunda más valiosa con 2.5 millones de libras, casi 3 millones de dólares. Una joya de las llamadas de pasar que llevó por primera vez la reina Sofía en 1983 durante una visita de Estado a los reyes de Suecia, y el día de su despedida del trono tras 39 años como reina.
La reina Letizia la usó por primera vez en la cena de gala celebrada en febrero de 2017 para cuando el expresidente argentino Mauricio Mauri y su esposa Juliana Awada visitaron España. Una pieza de la joyería Ansorena elaborada en platino y brillantes con charnelas que representan la flor de lis heráldica de los Borbones unidas por motivos vegetales de diamantes., por lo tanto es la más emblemática y significativa de la Corona española.
La tiara que escogió Letizia para su boda con el entonces príncipe Felipe, la Prusiana, sería la tercera joya más valiosa según el mismo estudio. Elaborada en platino, diamantes y un brillante en forma de lágrima en el centro de la pieza, esa tiara la lució Letizia es la que Letizia llevó con su vestido de Pertegaz el 20 de mayo de 2004.