La princesa Anne y el príncipe Edward se han convertidos en miembros clave de la Familia Real desde que la reina Isabel II falleció. Difícil resulta olvidar su estoico comportamiento durante el funeral de su hermana, que incluyó acompañar el ataúd de la fallecida monarca en un viaje de seis horas hasta Edimburgo.
Hace algunos días, fue ella la que fue en representación de la monarquía británica al funeral de Constantino II, ex monarca de Grecia. Su figura seguirá tomando relevancia durante la coronación del rey Carlos III. Así lo planteó el Dr. George Gross, investigador visitante en teología en el King's College de Londres, quien cree que su participación será importante durante el servicio que se realizará el 6 de mayo.
"En términos de rendir homenaje, ese sería el papel clave que podrían desempeñar", dijo el profesional a Express.co.uk, agregando: "Sospecho que serán prominentes".
Eso sí, se encargó de dejar en claro que hasta el momento "no hay nada que diga" que tienen que desempeñar un papel en definido, "porque no hay un momento particular en el servicio en el que tengan que desempeñar un papel además del elemento de rendir homenaje".
"No es crítico (que miembros de la familia real desempeñen un papel durante el servicio) en parte porque, por supuesto, si retrocedes en el tiempo, no siempre habrá esas figuras alrededor (del monarca), las figuras clave tienden a ser obispos o otras figuras fijas en lugar de miembros de la familia real", explicó.
Pase lo que pase, el rey Carlos III los tiene muy presentes, ya que el príncipe Edward y la princesa Anne se sumaron a quienes pueden actuar como suplentes del monarca cuando esté temporalmente enfermo o en el extranjero, luego de que se aprobara la Ley de Consejeros de Estado.
