Travis Barker es un músico talentoso que tuvo su gran punta del éxito a inicios de los año 2000 con su banda Blink 182. Aún siguen juntos y planean una gira por varios países para recordar sus más grandes canciones pero ahora es un hombre casado con Kourtney Kardashian y padre de familia.
Pero no siempre su vida fue de color rosa, en realidad al inicio estaba muy alejada de ello. Nació el 14 de noviembre de 1975 en California, su padre era mecánico y su mamá se dedicaba al hogar y cuidar de él y sus hermanos. Desde muy pequeño se mostró interesado en la música y su madre lo notó. Cuando cumplió cuatro años fue justamente ella quien le regaló su primer kit musical y lo inscribió a clases con un profesor de jazz.
Le gustaban muchos instrumentos como la guitarra, trompeta y por supuesto batería, en el que se profesionalizó. A los cinco años tomó clases de batería con Thomas Hogan y en la secundaria aprendió a tocar el piano e incluso intentó cantar. Iba a otros estilos, a otros instrumentos e incluso intentó ser skater o surfista pero de alguna forma la vida siempre lo hacía regresar a la batería. "Era como si estuviera conectado a ella", mencionó.
Desafortunadamente su madre fue diagnosticada con cáncer cuando él era muy pequeño y el día antes de entrar a la Escuela Secundaria Fontana falleció, dejando profundo dolor en el baterista de trece años en aquel entonces. Antes de morir su mamá le hizo una petición muy importante: que se convirtiera en músico y siguiera sus sueños.
Necesitaba dinero para seguir con sus clases, comprar instrumentos y todo lo necesario para cumplir la última voluntad de su madre. Tuvo que trabajar en diferentes oficios incluso como recolector de basura en Laguna Beach después de la secundaria para ganar algunas monedas.
Poco a poco fue tocando con varias bandas y ganando experiencia en conciertos locales, concursos y festivales en su región. Se enamoró del jazz pero fue especialmente influenciado por hip-hop y punk rock donde hasta ahora sigue haciendo una exitosa carrera musical. Su vida es muy diferente en estos tiempos; es padre, se convirtió en compositor y productor, uno de los mejores bateristas de la historia y esposo de Kourtney Kardashian.