Frogmore Cottage se convirtió en el primer hogar de la pareja como una familia de tres, por lo que el príncipe Harry reveló cuánto amaban él y Meghan Markle la residencia. Cuatro años después de haberse mudado, el rey Carlos III les ha pedido evacuarla a pesar de haber pagado todos los gastos.
La propiedad ubicada en los terrenos de Windsor fue un regalo DE parte de la reina Isabel II a los duques de Sussex después de su boda en 2018. Sin embargo, debido a la enorme remodelación que se le tuvo que hacer para hacerla habitable, pudieron mudarse hasta unos meses después tras el nacimiento del príncipe Archie en 2019.
A pesar de haberse mudado a Estados Unidos tras renunciar a ser miembros activos de la familia real en 2020, Frogmore Cottage seguía siendo su hogar en el Reino Unido. De hecho, fue ahí donde la princesa Lilibet celebró su primer cumpleaños y donde el príncipe Harry se había quedado las tres veces que viajó a su tierra natal este año.
Esto pensaban el príncipe Harry y Meghan Markle sobre Frogmore Cottage
Fue el representante del príncipe Harry y Meghan Markle que confirmó que el rey Carlos III le había pedido a la pareja mudarse de Frogmore Cottage. Cuatro meses después de la solicitud, los duques de Sussex finalmente han desalojado la residencia, quedándose sin lugar dónde quedarse en sus próximas visitas.
A través de su libro de memorias, “Spare”, el príncipe Harry reveló cómo él y Meghan Markle realmente se sentían sobre su antigua casa. “Meg y yo mudamos nuestra oficina al Palacio de Buckingham. También nos mudamos a una nueva casa. Frogmore estaba lista. Nos encantó ese lugar. Desde el primer minuto. Sentí que estábamos destinados a vivir allí”, narró.
“No podíamos esperar a despertamos por la mañana, dar un largo paseo por los jardines, ver cómo estaban los cisnes. Especialmente el gruñón Steve. Conocimos a los jardineros de la reina, conocimos sus nombres y los nombres de todas las flores; estaban encantados de cuánto apreciamos y elogiamos su arte”, aseguró.
Sin duda alguna Frogmore Cottage fue un lugar especial para el príncipe Harry y Meghan Markle, pues además, en su docuserie de Netflix se les puede ver tristes por tener que dejar la residencia para iniciar una nueva vida en Estados Unidos.