La princesa Diana de Gales estaría celebrando este 1 de julio su cumpleaños número 61 de no haber sufrido aquel fatídico accidente que le arrebató la vida en 1997.
Fue a los 36 años cuando sin saberlo celebró su último cumpleaños y lo hizo de forma espectacular, tras superar el escándalo que dejó hacer oficial su divorcio con el rey Carlos III.
Aquel 1 de julio de 1997, la princesa Diana recibió en la puerta de su casa más de 90 ramos de flores y su hijo, el príncipe Harry le llamó desde la escuela junto con un compañero para cantarle el tradicional “Feliz Cumpleaños”.
Horas más tarde Lady Di asistió a una gala de caridad que se realizó por el centenario de la galería Tate de Londres. Para ello utilizó un vestido negro, similar al famoso al de la venganza, aquel que usó cuando su esposo, el ahora monarca inglés, admitió su infidelidad en público.
La pieza fue una obra del diseñador Jacques Azagury, gran amigo de Lady Di, el cual complementó con una gargantilla de esmeraldas y diamantes que había sido de la reina María, abuela de Isabel II.
Acompañada de su hermano Earl Spencer, la princesa Diana lució espectacular. Desde su llegada recibió decenas de regalos, flores, globos y todo tipo de presente de sus admiradores que estaban felices por ella.
Príncipes William y Harry se unen para celebrar a su madre
Pese a las diferencias que tiene el príncipe William con su hermano Harry, luego de ventilar secretos de la familia real en su documental de Netflix y en su libro de memorias “Spare”, ambos dejaron de lado esta disputa para celebrar en grande a su madre, Lady Di y participaron en la entrega de los Diana Awards creados para reconocer la labor de jóvenes que emprenden acciones positivas y de cambio en el mundo.
Cabe señalar que el discurso pronunciado por los dos fue de manera virtual así que la tan ansiada reunión de los hermanos no se concretó.