Finalmente luego de varios días de ceremonias y honores los restos de la reina Isabel II serán serán depositados al interior de la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor.
Esta mañana el féretro de la monarca llegó de la Abadía de Westminster donde se le rindió un homenaje solemne. Los espectadores fueron testigos de los rituales que dieron por terminado su reinado, el más largo en la historia de Reino Unido.
Al finalizar el acto, los restos fueron bajados a la bóveda real, un espacio de 16 pies de profundidad (4.87 metros aproximadamente) cubierta por completo de azulejos en forma de diamante blanco y negro.
Dicho espacio contiene los ataúdes de 25 miembros de la realeza. Para poder acceder a él hay que caminar detrás de la capilla de la antigua fortaleza, un pasillo con escaleras.
Cabe señalar que éste no será el lugar en el que descansarán los restos de la reina. Esta tarde en una ceremonia más íntima, solo con los miembros de la familia real, el ataúd será trasladado a la capilla del rey Jorge VI, donde también reposan los restos de la reina Isabel, la reina Madre, de la princesa Margarita y del príncipe Felipe de Edimburgo.
La reina Isabel II mandó construir la capilla conmemorativa en 1962, para que allí fueran depositados los restos de su padre.