Los príncipes William y Harry dejaron de lado sus diferencias y se unieron a sus esposas Kate Middleton y Meghan Markle para honrar a la reina Isabel en el servicio que se le hizo en Westminster Hall. Los hermanos caminaron en la conmovedora procesión de poco más de media hora que se llevó a cabo desde el Palacio de Buckingham.
Durante el servicio, las parejas se pararon en formación frente al ataúd en catafalco de la reina cubierto de púrpura, flanqueado por una alta vela amarilla en cada esquina de la amplia plataforma escarlata y custodiado por la guardia real en el corazón de Westminster Hall, el escenario de algunos de los momentos más famosos de la historia británica.
Los duques de Sussex estaban en la parte de atrás del grupo de miembros de la realeza, con Harry justo detrás de William y Meghan detrás de Kate. Este momento pasó a la historia pues es la primera vez que se ve a las parejas juntas desde su paseo sorpresa en el Castillo de Windsor el sábado en una muestra unidad.
El ataúd de la reina entró en Westminster Hall mientras el coro de la Abadía de Westminster y el coro de la Capilla Real de Su Majestad, el Palacio de St. James, cantaban el Salmo 139. Cuando el féretro llegó, Carlos, Guillermo y Ana saludaron. Harry y el príncipe Andrew, quienes no pueden usar uniforme militar, inclinaron la cabeza.
Meghan Markle fue vista aparentemente limpiándose una lágrima y hacer una profunda reverencia antes de salir de las Casas del Parlamento esta tarde. La duquesa de Sussex se había unido al rey Carlos , Camilla, la reina consorte, el príncipe Guillermo y la princesa Kate Middleton, mientras la familia seguía una vez más el cuerpo de la difunta reina Isabel II.
Anteriormente, el rey Carlos y los miembros de la realeza de alto rango saludaron el ataúd mientras lo llevaba un grupo de ocho soldados de la Guardia de Granaderos del 1er Batallón de la Compañía de la Reina, al Salón de Westminster.
Meghan intentó respirar hondo cuando el ataúd de la reina pasó frente a ella. A pesar de su supuesta pelea con el resto de la familia real, la duquesa siempre ha tenido palabras cálidas para la reina.