En medio de la controversia por la batalla legal que mantiene Nacho Palau para que sus hijos vivan junto a sus dos hermanos, Diego y Tadeo, hijos biológicos de Miguel Bosé, el escultor sorprendió al revelar que mantuvo una conversación con el intérprete de "Amante Bandido", de quien se separó en 2017.
Palau se convirtió en el tercer finalista de Supervivientes 2022 y siempre fue muy cuidadoso al hablar de su relación y ruptura con Miguel Bosé durante el "reality show".
Tras acabarse el concurso, Nacho reveló que hace unos días mantuvo una conversación con el artista, quien lo felicitó por su paso en el programa televisivo. En declaraciones para la revista Diez Minutos, Palau detalló que la conversación con el artista fue bastante conciliadora aunque aún les quedan muchos asuntos por resolver, el principal es la demanda de filiación que Palau interpuso.
Actualmente, Palau se hace cargo de sus mellizos Ivo y Telmo, mientras que el cantante cuida de los otros dos, Diego y Tadeo, en México. Tras su separación, Nacho buscó que los niños estuvieran juntos, pero, según reveló, en este momento no le gustaría tener una custodia compartida, pues "me costaría mucho separarme de Ivo y Telmo".
Para el escultor, el asunto de la controversia legal llegará a su fin cuando "se pueda dialogar y confiar plenamente en el otro progenitor. Cuando haya confianza absoluta en el otro cuando tus hijos están con él y mucho respeto". De acuerdo con Palau, su expareja no se siente plenamente tranquilo cuando sus hijos están en Chelva y le preocupa mucho su seguridad.
Bosé y Palau se conocieron cuando tenían 37 y 19 años, respectivamente, y han convivido durante más de dos décadas. En ese tiempo tuvieron dos hijos cada uno con el que formaron una gran familia, pero durante su separación pelearon por la custodia de los niños, pues legalmente dos hijos eran de Bosé y dos eran de Palau.