Jennette McCurdy tenía que hablar de Ariana Grande en sus memorias "I'm Glad My Mom Died", que acaba de publicar el 9 de agosto. Ambas protagonizaron la serie "Sam y Cat" para Nickelodeon en 2013, un spin-off de dos series: "iCarly", de donde salió el personaje de Jennette (Sam), y "Victorious", de donde provenía el personaje de Grande (Cat).
En el libro de reciente publicación, la comediante de 30 años explicó que su animadversión por Ariana Grande comenzó poco después de que iniciara la filmación del programa, en el que interpretan a roomies que inician un negocio de niñeras.
Y es que mientras Ariana Grande conseguía permisos para seguir desarrollando su hoy exitosísima carrera musical, a Jennette se los negaban.
Contó: "Tenía programadas dos películas durante 'iCarly' que tuve que rechazar porque el equipo de 'iCarly' no me descartaba de los episodios para filmarlos". Sin embargo, para que Ariana pudiera no estar presente, adaptaban situaciones para su personaje, como meterlo dentro de una caja.
"¿Estás bromeando? ¿Tengo que rechazar películas mientras Ariana está fuera de tono en los Billboard Music Awards? A la chingada".
Jennette, de 30 años, admitió que estalló una vez que a Grande, de 29 años, se le permitió abandonar la filmación.
"Estoy enojada por eso. Estoy enojada con ella. Celosa de ella. Por varias razones", escribió. "Así que ahora, cada vez que falta al trabajo se siente como un ataque personal. A partir de ese momento no me gustó. No podría gustarme.
McCurdy eligió un tono de comedia para escribir sus memorias, que derivan de un show que presentó. En ellas, además de las anécdotas desgarradoras, sostuvo que rechazó un acuerdo por el que le pagarían 300 mil dólares para que nunca hablara públicamente sobre sus experiencias en Nickelodeon.