Ricardo Montaner en entrevista con Yordi Rosado para su canal de YouTube compartió detalles de su vida privada y profesional, haciendo un breve repaso desde sus inicios hasta convertirse en la estrella que es ahora.
El cantante venezolano abrió su corazón y contó a detalle el día que conoció a su esposa, Marlene Rodríguez Miranda, madre de tres de sus cinco hijos.
De acuerdo con su relato, él conoció a la mujer de su vida el día en que ella se estaba casando con su primer esposo. Al parecer, él asistió a esa boda porque lo invitó el hermano de ella, quien era el director de la disquera a la que pertenecía en ese momento.
"Cuando la vi, ya estaba casada; no fui a la iglesia, sino que a la fiesta... y luego la dejé de ver como por seis meses, su matrimonio duró muy poco", mencionó.
Montaner reconoce que desde siempre se sintió atraído por Marlene, sin embargo dejó de verla por mucho tiempo, hasta el día en que se reencontró con ella en la boda.
El intérprete de "La gloria de Dios" detalló que una vez que supo que el primer matrimonio de Marlene no funcionó se acercó a ella y ocurrió la magia, pues se enamoraron y decidieron casarse para formar una familia.
"Nos enamoramos desde el primer momento (...). Yo no podría estar al lado de ella si no supiera que estoy enamorado", se sinceró.
Ricardo Montaner asegura que fue a través de su música como conquistó a su actual esposa, hace más de 30 años. De acuerdo con su testimonio la pudo enamorar gracias a que ella dirigió su primer video musical.
"La enamoré a punta de guitarra, mano. ¿Viste cuando te pasa, cuando te vas metiendo y no te vas dando cuenta... cuando estás entrando en algo que desconoces, que no sabes qué es", mencionó.
¿Cuántas veces ha estado casado Ricardo Montaner?
Ricardo Montaner y Marlene tienen más de 30 años de casados y tres hijos en común: Ricardo, Mauricio y Evaluna, juntos forman una de las familias más mediáticas del espectáculo.
Anteriormente, el cantante estuvo casado con Ana Rosa Pönicke con quien tuvo a sus hijos Alejandro y Héctor, quienes llevan una vida completamente alejada de los reflectores.