Hace apenas una semana el príncipe George cautivó a millones de personas con su adorable retrato oficial para celebrar su cumpleaños número nueve.
A su corta edad el pequeño sabe cuál es su destino en la monarquía británica pues desde hace dos años sus padres le comunicaron que algún día se convertirá en rey, debido al lugar que ocupa en la línea de sucesión al trono.
Sin embargo y pese a que sabe que en algún punto de su vida ocupará el lugar que por 70 años ha sido de la reina Isabel II, su padre el príncipe William, pero en especial, su madre, Kate Middleton hacen grandes esfuerzos para que el niño tenga una vida lo más normal posible.
De acuerdo con una experto real, la duquesa de Cambridge quiere evitar a toda costa que su hijo pase por lo mismo que pasó el príncipe William cuando supo que será rey, pues desde muy pequeño tuvo que lidiar con el estrés y el peso de una responsabilidad que aún no asume.
"William luchó por conocer su destino cuando era joven y está muy interesado en que George no experimente la misma sensación de carga desde una edad temprana", explicó el informante.
"George entiende el orden de sucesión y sabe que un día será rey, pero también sabe que queda un largo camino en el futuro, por lo que por ahora no representa un problema”, añadió.
Los duques de Cambridge cuidan los eventos públicos a los que va su hijo George
Según el informante, los duques de Cambridge eligen cuidadosamente los eventos públicos a los que asiste su hijo mayor, pues no desean que se sienta perturbado o incómodo ante las cámaras o los asistentes.
"No es tan extrovertido ni tan extrovertido como su hermana o su hermano pequeño, pero parece bastante cómodo asumiendo los pocos deberes públicos que ha realizado".
El príncipe George en los eventos públicos a los que ha asistido se ha comportado de acuerdo a los lineamientos establecidos. Durante su paso por los festejos del Jubileo de Platino llamó la atención pues a diferencia de sus hermanos Charlotte y Louis se convirtió en tema de conversación en los medios pero de manera positiva.
Su última aparición pública fue en Wimbledon donde llamó la atención porque pese a que en Londres las temperaturas eran altas, fue obligado a vestir formal de traje y corbata, mostrándose incómodo ante las cámaras.