Luego de que en los últimos días, Kim Kardashian fuera severamente criticada aparentemente por los daños que dejó al histórico vestido de Marilyn Monroe que usó en la pasada MET Gala, los administradores del museo a través de un comunicado explicaron que la famosa socialité no causó afectaciones en la prenda.
"Desde la parte inferior de los escalones del Met, donde Kim se puso el vestido, hasta la parte superior donde se lo devolvieron, el vestido estaba en las mismas condiciones en las que comenzó", reza el comunicado firmado por la vicepresidenta de publicaciones y licencias de Ripley, Amanda Joiner, según informó Page Six.
Asimismo en la cuenta oficial de Instagram de Ripley a través de una dinámica de preguntas y respuestas, los administradores de estos bienes explicaron que de acuerdo con un informe desde el 2017 se detectó que el vestido tenía alguna costuras dañadas, y no fue el uso que le dio Kim Kardashian lo que lo rompió.
El museo aclaró que contrario a lo que se especula, jamás se le pagó a Kim Kardashian por mostrar al mundo esta icónica prenda en la MET Gala sino más bien, fue la socialité quien hizo una importante donación a dos organizaciones benéficas en el área metropolitana de Orlando a nombre del museo.
Para finalizar Ripley's Believe It or Not! declaró que el vestido que data de 1962, seguirá en exhibición hasta el otoño del 2022.
Recordemos que para que Kim Kardashian pudiera usar este vestido tuvo que bajar mínimo 7 kilos de peso en menos de tres semanas. Si bien esto significó todo un reto y disciplina para ella le valió severas críticas promover dietas y estilos de vida pocos saludables con fines basados en la apariencia.