Kim Kardashian apareció rubia por primera vez en mucho tiempo para darle un toque especial a su vestido en la MET Gala.
La reality star usó el famoso vestido de Marilyn Monroe con el que le cantó “Happy Birthday Mr. President” a JFK en 1962.
En su momento, el vestido fue descrito como “el vestido más caro del mundo”, ya que era una tela decorada con miles de cristales. La prenda ganó un Récord Mundial Guinness y después fue comprado por el museo Ripley’s por $4.8 millones de dólares.
“La idea vino a mí después de la gala de septiembre del año pasado. Me dije a mi misma, ¿cuál es lo más estadounidense que se te ocurre? Y pensé en Marilyn Monroe”, aseguró en entrevista con Vogue.
“Para mí, el momento más icónico de la actriz fue cuando le cantó a JFK en sus 45 años y yo necesitaba ese look. Ahora, todos usan vestidos con trasparencias, pero en esa época, eso no pasaba. De alguna manera, este es el verdadero naked dress. Es por eso que fue tan impresionante”, finalizó.