Una vez más, el rapero y empresario Kanye West está en el ojo del huracán, pues su exmánager, St. John, reveló que lleva semanas buscándolo sin conseguir éxito.
Durante una entrevista con el portal RadarOnline, el exrepresentante de negocios de "Ye" explicó que ha intentado entregarle unos documentos, pero al parecer no hay rastro de Kanye West.
Asimismo, el ex St. John reportó que el productor había mostrado un temperamento agresivo y dejó de pagar las cuentas que acordó antes de desaparecer.
Como consecuencia, St. John trató de entregarle unos documentos de una demanda, pero al acudir al domicilio acordado, se percató de la inexistencia del mismo.
Tal parece que el exmánager, al no tener éxito en su búsqueda, contrató a un agente para entregarle a "Ye" los documentos en cualquiera de sus direcciones, pero al parecer los negocios y residencias del intérprete de "Bound 2" desaparecieron.
Otro argumento por parte de St. John es que antes se podía comunicar con los abogados del rapero, pero, de un momento a otro, dejaron de trabajar para Kanye.
Eso no fue todo. Los ahora exabogados le aportaron el nombre del nuevo bufete que representaría a West, pero al comunicarse, St. John se enteró que no tenían relación con el famoso.
El ex mánager dijo que Kanye West lo contrató por 18 meses a partir de marzo de este 2022, pero las rupturas en sus relaciones comerciales, así como los riesgos en sus acuerdos con otras empresas, provocaron que el empresario no cumpliera con su parte.
Cabe señalar que Kanye West tampoco ha dado señal alguna en redes sociales.
Kanye West vende su colección de coches de lujo, ¿está en la ruina?
Tras perder varios patrocinios y trabajos por culpa de sus polémicas, West se habría visto en la tesitura de deshacerse de su extensa colección de coches, entre los que se encuentran un par de Lamborghini (Aventator y Urus), un Bugatti Veyron o un Mercedes McLaren SLR, entre otros.
Una situación que le habría llevado a cambiar su habitual estilo de vida, basado en la ostentación y el lujo. Está por ver si este mal momento lleva a Kanye West a recapacitar acerca de sus comentarios ofensivos y recupera la confianza de las marcas, cada vez más escépticas a la hora de contratar sus servicios.