Este año, Jennifer Garner estuvo en el centro de la polémica, luego que su ex Ben Affleck hiciera fuertes confesiones sobre cómo fue batallar con sus emociones, mientras estaba casado con la actriz, a quien culpó del alcoholismo con el que lucha.
Luego de que Jennifer Lopez y Ben Affleck retomaran su romance y llegaran al altar, todo parece indicar que la protagonista de "Como si tuviera 30" se alejó de la polémica y se ha concentrado tanto en su carrera como actriz, en sus negocios de alimentos orgánicos para bebé y, por supuesto, de su familia.
Además de sus películas entre las que destacan éxitos de taquilla como "Pearl Harbour" Jennifer Garner deslumbra por su gran naturalidad para causar sensación no solo en las alfombras rojas, también en sus redes sociales, donde suele compartir detalles de su vida y su trabajo con sus fans.
El encuentro con su exesposo
Esta vez, la actriz sorprendió al compartir una fotografía de un encuentro muy especial que tuvo durante un vuelo de avión. Y es que Jennifer Garner, quien recientemente se hizo un cambio de imagen al dejar atrás su cabello largo y optar por un corte bob bastante favorecedor, se encontró con el actor Edgar Ramírez.
Resulta que Edgar Ramírez interpretó el papel de "Carlos Torres", su esposo en la película "¡Hoy sí!" ("Yes Day", 2021), una comedia familiar dirigida por Miguel Arteta, que sigue a la familia Torres, cuyos padres están tan comprometidos con sus trabajos y carrera profesionales que tienen poco tiempo para destinar a algunas actividades entre ellos y sus hijos.
“Cuando abordas un avión y tu compañero de asiento es tu marido de la película. @edgarramirez25”, escribió junto a la foto en la que ambos se aprecian en sus asientos de avión y visiblemente contentos por el encuentro.
La película
En la cinta, las responsabilidades de Allison (Jennifer Garner) y Carlos (Edgar Ramirez) parecen llevarlos a negarse, prácticamente, a todo, a los juegos infantiles, a las lecturas de libros por las noches, a las reuniones entre vecinos, a las visitas a familiares y poco a poco sus hijos lo empiezan a resentir, especialmente, los más pequeños.
Entendiendo que se acercan a un punto sin retorno, Allison y Carlos deciden darles una sorpresa a sus hijos, tener un día especial, donde dirán sí a todo lo que ellos propongan, desde desayunar pizza y tener guerra de comidas, hasta entrar a un autolavado con las ventanas abiertas, lo que los lleva a una divertida aventura por Los Ángeles, que los acercará como familia.