El rey Felipe VI y la reina Letizia se preparan para celebrar la Navidad al igual que millones de personas en el mundo y aunque parezca extraño la pareja de monarcas hará una cena de lo más tradicional y sencilla, a diferencia de los banquetes que ofrecía el rey Juan Carlos y la reina Sofía.
Fieles a un estilo de vida más discreto en el plano familiar, el rey Felipe VI y su esposa pasarán estas fiestas decembrinas acompañados de sus hijas, la princesa Leonor, que regresó a Madrid de vacaciones escolares, y la infanta Sofía.
La gran cena de Nochebuena será exclusiva para cinco personas, los reyes, sus hijas y la madre de la reina, Paloma Rocasolano. El personal de la residencia real está obligado a terminar sus labores antes de las siete de la tarde para que puedan salir a disfrutar con sus familias de las fiestas. Solo por este día la familia real se sirve sola los alimentos a la mesa.
Al ser un día muy especial, la reina Letizia sede a los caprichos y antojos de su familia así que les permite romper el estricto régimen alimenticio, por lo que en la mesa no faltarán el pavo relleno de verduras, salmón ahumado, pudín de marisco, jamón ibérico, foie y angulas. Además del helado de café, el postre favorito de la suegra del rey Felipe, y otros dulces.
Al terminar se dirigen al tradicional árbol de navidad para abrir los regalos, mirar juntos el mensaje navideño de la corona y después acuden a la residencia de la reina Sofía para externarle buenos deseos a ella y a su hermana, la princesa Irene de Grecia.
Es probable que al término de este ritual en la antigua Zarzuela arriben amigos tanto del rey Felipe como de Letizia. Entre ellos su hermana, Telma Ortiz y su pareja, Robert Gavin Bonnan.
El plan de los reyes de España para Año Nuevo
Por ahora se desconoce el plan de la familia real de España para la fiesta de Nochevieja. Un plan ideal para la princesa Leonor y su hermana Sofía sería reunirse con sus amigos en común en algún sitio de Madrid, sin embargo, debido a los compromisos de su padre, sus planes podrían verse afectados.
Y es que justo el 1 de enero, el rey Felipe VI debe viajar a Brasil para estar presente en la ceremonia de toma de posesión del nuevo presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva, por lo que una opción sería que las menores y su madre lo acompañaran.