Tan solo una semana después de haberse comprometido, Lady Di comenzó a sufrir graves problemas a su salud tras un comentario inapropiado por parte del rey Carlos III. Desde entonces, la princesa Diana comenzó a desarrollar distintos trastornos mentales con los que llegó a pensar que ya no quería vivir.
Es bien sabido que el rey Carlos III y la princesa Diana no tuvieron un matrimonio feliz, pues el hijo mayor de la reina Isabel II seguía enamorado de una de sus exparejas, la ahora reina consorte Camilla. Incluso el monarca se lo aseguró a Lady di el día de su boda y desde entonces no dejaron de dar de qué hablar.
El comentario del rey Carlos III que casi le cuesta la vida a la princesa Diana
A pesar de no estar enamorados, el rey Carlos y Lady Di se casaron y los problemas no tardaron en relucir, mismos que venían arrastrando desde que se comprometieron. Tan solo una semana después de haber aceptado casarse con el monarca, la princesa Diana comenzó a sufrir bulimia.
En 1995 la princesa Diana contó a la BBC que por mucho tiempo sufrió desordenes alimenticios, mismos que "eran síntomas de lo que estaba pasando en mi matrimonio". En la explosiva entrevista, Lady Di además recordó: "La bulimia comenzó una semana después de comprometernos. Mi esposo puso su mano en mi cintura y dijo algo como, 'Oh, estás un poco gordita de aquí, ¿no?' Y eso desencadenó algo en mí".
Meses después de haberse casado, la salud mental de la princesa Diana comenzó a deterioraros e incluso llegó a pensar en quitarse la vida tras sufrir depresión y ansiedad. "Estuve a punto de cortarme las muñecas. Regresé a Londres para buscar tratamiento", recordó en aquel entonces.