El rey Carlos III vio la oportunidad de darle a su esposa el título que él creía que merecía y logró convencer a Isabel II de que nombrara reina consorte a Camilla. De acuerdo con nueva información, la fallecida monarca tenía otros planes para su neura, pues en un principio quería que fuera princesa consorte.
Lo que muchos podrían llamar como chantaje, fue la oportunidad que el rey Carlos III tomó cuando se presentó el problema legal en el que se vio envuelto su hermano, el príncipe Andrés. La reina Isabel II habría pedido un favor a su hijo mayor, por lo que el heredero al trono se cobró con su más grande deseo.
Así fue como el rey Carlos III convenció a Isabel II de dar el título de reina consorte a Camilla
De acuerdo con el autor del nuevo libro biográfico del rey Carlos III, la decisión de Isabel II de dar a Camilla el título de reina consorte tiene que ver con el escándalo del príncipe Andrés. Luego de que el duque de York fuera acusado de agresión sexual a una menor, dio una gran cantidad de dinero para que se cerrara el caso lo antes posible.
Es sabido que la reina Isabel II siempre tuvo un trato especial con el príncipe Andrés, por lo que decidió pagar el caso ella misma. El problema, de acuerdo con el escritor estadounidense, es que ese dinero pertenecería a Carlos III por lo que él no se sentía conforme con la decisión de la monarca.
Lejos de intentar protestar, pues no sería apropiado un escándalo durante el Jubileo de Platino de la reina Isabel II, el entonces príncipe Carlos vio la oportunidad de aceptar algo a cambio. De acuerdo con Christopher Andersen, el heredero al trono había condicionado a la monarca de dar el dinero si cambiaba el título de Camilla.
El rey Carlos III pidió a Isabel II dar el título de reina consorte a Camilla una vez que él ascendiera al trono, en lugar de princesa consorte, como se tenía previsto. "Y así, en una especia de trato implícito, esta fue la compensación. Como recuerdan, el anuncio tomó a todos por sorpresa, pues ella estaba tan encontrando de que Camilla se convirtiera en reina", confesó Andersen.
