Los miembros de la Familia Real son tan humanos como nosotros, con momentos tristes, felices, de enojo, comidas favoritas, actividades que no les gusta hacer y por supuesto, hobbies. Es muy curioso conocer para qué son buenos cada miembro de la Realeza más allá de sus actividades normales que ya conocemos.
Por ejemplo, el Rey Carlos es muy bueno pintando, el príncipe William canta muy bien, el príncipe Harry es un experto en malabares y la reina consorte Camilla tiene gran habilidad jugando ping-pong.
Ahora es Reina Consorte pero por años tuvo el título de Duquesa de Cornwall representando a la Reina Isabel en diferentes actos públicos. En algunos de ellos las actividades cambian e invitan a los miembros de la Realeza a demostrar sus habilidades. Hemos visto a Kate Middleton jugando rugby, al príncipe William cocinando y hasta a la Reina Isabel partiendo un pastel con una espada. Pero una de las actividades en las que más ha destacado Camila es justamente jugando ping-pong pues en varias ocasiones ha demostrado que le gusta y además es bastante buena.
El equipo de la reina consorte Camilla ya sabe que si ve una mesa de ping-pong es muy probable que no les haga caso a las actividades que tiene que hacer y corra por la paleta buscando contrincante.
Así sucedió en la celebración del centenario de la RAF Halton donde vistiendo una bonita pieza color azul navy con puntos blancos combinado con aretes de perlas, tomó la paleta y jugó un buen rato ping-pong incluso casi subiéndose a la mesa para poder conseguir otro punto.
No se sabe si en su casa tenga una mesa de ping-pong pero no nos extrañaría que de vez en cuando rete al ahora Rey Carlos en una partida para demostrar sus habilidades.