Nuevamente, la reina consorte Camilla realizó un tributo a la fallecida reina Isabel con una de sus acciones oficiales. Si el 22 de noviembre se llevó la miradas por una tiara de zafiro belga, que anteriormente fue propiedad de la difunta monarca, esta vez su gesto fue más tierno.
La esposa del Rey Carlos III llegó este jueves 24 de noviembre hasta la guardería de Barnardo en Bow con un especial regalo para los niños: ositos de peluche Paddington. Estos juguetes fueron los que los dolientes dejaron cerca de las residencias reales tras la muerte de la reina Isabel en septiembre.
Los ositos que fueron recogidos fueron lavados y entregados en un canasto de picnic. El acto fue parte de una fiesta de té que protagonizó la reina consorte. Estuvo acompañada por Hugh Bonneville, conocido por su papel del Sr. Brown en las películas del popular oso, quien leyó la historia "Paddington se baña".
Un tierno gesto que muestra a la reina consorte Camilla como una monarca cercana, quien usó para la ocasión un vestido verde hasta los tobillos con cuello alto.
Además, lució su amor por los broches, otra de las cosas que tiene en común con la fallecida reina Isabel. En esta oportunidad, optó por el "Pin de colibrí", de una de sus marcas de joyería favoritas, Van Cleef & Arpels, que estaba compuesto por ónix, lapislázuli, malaquita y oro amarillo de 18 quilates.
