Al parecer, entrar en el vestido de Marilyn Monroe fue más difícil para Kim Kardashian de lo que todos pensábamos.
En el nuevo capítulo de “The Kardashians” para Hulu, Kardashian narró toda la hazaña que fue moldear su figura para poder entrar en el vestido con el que apareció para la MET Gala, acompañada de su entonces novio, Pete Davidson.
Este vestido fue usado por Monroe en 1962 para cantarle al presidente John F. Kennedy en su cumpleaños #45. Cuando una replica llega a su casa, Kardashian aparece diciendo “si este no me queda, ni siquiera me puedo probar el original. Así que hice una búsqueda en Google de sus medidas y estoy comparando con las mias”.
En cámara, la fundadora de SKIMS agrega que por la medida de sus hombros, puede caber en vestidos de cualquier talla. “Nadie confía en nosotros, por años, ni siquiera mandaban pruebas. Y cuando llegaba a París y me ponía las pruebas, me decían ‘ay, sí le entran’. Así que no sé cómo convencer a la persona que tiene al original que mi figura se moldea”, dijo.
Kardashian también agregó que no tenía un plan B: “El plan B es que estaré en mis pijamas de SKIMS en casa, comiendo”.
Finalmente Kim Kardashian relata que cuando se probó el vestido, incluso le quedaba un poco grande por lo que se sentía muy segura de sí misma.