Cristiano Ronaldo abrió su corazón para el programa de Piers Morgan de Talk TV en donde no solo habló sobre la crisis que enfrenta en el Manchester United sino que también sobre su vida privada y el difícil momento que pasó con su esposa, Georgina Rodríguez, cuando perdieron a su bebé a principios de este año.
Con lágrimas en los ojos, la estrella del balompié contó a las cámaras cómo le compartieron a sus hijos la noticia de que su hermanito había muerto. De acuerdo con su relató todo ocurrió al regreso de Georgina del hospital cuando sus cuatro hijos comenzaron a preguntarle a su madre en dónde estaba el otro bebé y por qué solo había llegado con uno a casa.
"Gio llegó a casa y los niños comenzaron a decir dónde está el otro bebé, ¿dónde está el otro bebé?", relató.
Aunque fue una noticia de compartir, Cristiano y Georgina les dijeron la verdad a los niños, que su hermanito, Ángel, había muerto y ahora estaría en el cielo.
El jugador portugués reveló que fue su hijo mayor, Crsitiano Jr., quien comprendió lo que había sucedido desde un principio y para los otros tres niños fue más difícil de asimilar.
“Los otros al principio, alrededor de la mesa, los niños comienzan a decir: 'Mamá, ¿dónde está el otro bebé...?' …y después de una semana digo seamos francos y seamos honestos con los niños, digamos que, Ángel, que es su nombre, se va al Cielo”, mencionó.
Cristiano Ronaldo ahora ve la vida diferente
Cristiano Ronaldo confesó al presentador que la muerte de su hijo fue algo muy complicado de asimilar para toda la familia pero desde lo sucedido han tratado de mantener su memoria con vida y seguir más unidos que nunca.
"No les voy a mentir a mis hijos, les digo la verdad, que fue un proceso difícil. De alguna manera, me volví más padre, más amigo de ellos", comentó.
"Me hice más amigo de Gio. Por supuesto que era una amiga, pero siento más amor por ella y por mis hijos y empiezo a ver la vida con una perspectiva diferente", añadió.
En la extensa conversación retomada por The Sun, uno de los mejores jugadores de futbol del mundo confesó que desde la muerte de su padre, en el 2005, no se había sentido tan triste, pues no esperaba que algo así pasaría con su hijo. Sin embargo, trata de seguir adelante honrando la memoria de ambos, conservando sus cenizas en un espacio muy especial que construyó en el sótano de su casa.
"Es algo que quiero retener por el resto de mi vida y no tirarlo al océano o al mar. sigo conmigo Están al lado de mi papá. Tengo una pequeña iglesia abajo, una capilla, y allí mantengo a mi papá y a mi hijo", explicó.
"El peor momento que pasé en mi vida, desde que murió mi padre... cuando tienes un hijo, esperas que todo sea normal, y tener ese problema, es duro, ya sabes, como ser humano, que yo y Georgina pasamos momentos bastante difíciles porque no entendemos por qué nos pasó", sentenció.
Después de asimilar lo que había sucedido, Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez agradecieron porque su hija Bella Esmeralda nació y con ella la familia creció y ahora enfocan su energía en verla crecer junto a los otros pequeños.