Cuando la princesa Diana y su madre, Frances Shand Kydd, se casaron con sus respectivos maridos, las dos mujeres se enfrentaron al mismo trabajo duro: tener un heredero varón.
En junio de 1954, Frances Roche se casó con John Spencer, vizconde de Althorp (más tarde el octavo conde de Spencer) , en una ceremonia espectacular en la Abadía de Westminster. A los 18 años, se convirtió en la mujer más joven casada en la Abadía en las cinco décadas anteriores. La reina Isabel II y otros miembros de la familia real estuvieron entre los invitados al servicio.
John era el único hijo de Albert Spencer. Era heredero de la propiedad de Althorp. Tras la muerte de su padre en 1975, se convirtió en el octavo conde Spencer.
Entonces, cuando John se casó con Frances, la presión estaba en tener un hijo varón que heredara la nobleza de Spencer .
Pero, según los expertos reales, para Frances, la carga de dar a luz a un heredero varón saludable fue demasiado y, en última instancia, resultó en la separación y quiebre del matrimonio.
Los dos primeros hijos de la pareja fueron niñas: Sarah, nacida en marzo de 1955, y Jane, nacida en febrero de 1957. Luego, en enero de 1960, para deleite de la pareja, nació su primer bebé: John; sin embargo, solo 10 horas después de su nacimiento, John murió.
El nacimiento de Lady Di
A partir de este momento, la presión sobre Frances aumentó.
“Y todo este tiempo, [tenía] un sentimiento de culpa de que ella era una especie de fracaso, que por supuesto no lo era, porque, como sabemos ahora, el sexo del niño lo determina el varón, no la mujer”, comentó un experto real.
Un año después, en 1961, nació el cuarto hijo de los Spencer: una niña a la que llamaron Diana.
El experto real, Morton dijo: "Hubo una consternación generalizada porque todos estaban ansiosos de que fuera un niño. Diana hasta el día de su muerte, pensó que ella era la hija no deseada".
El divorcio de los padres de Lady Di
En 1964, el tan esperado heredero Spencer llegó con el nacimiento de Charles, pero ya era demasiado tarde para el matrimonio de Frances y Johnny.
En 1967, Frances dejó a al padre de la princesa Diana para estar con Peter Shand Kydd, heredero de una fortuna de papel tapiz en Australia, a quien había conocido el año anterior. La pareja se casó en 1969 pero se separaron años después, en 1988. Mientras tanto, John se casó con Raine, condesa de Dartmouth, en 1976.
Diana a menudo estuvo presente en los intercambios acalorados de sus padres, siendo testigo del impacto doloroso de la lucha de su madre en el matrimonio. El biógrafo afirmó que impactó profundamente a la futura princesa y dijo que tuvo un "efecto profundo" en ella .
La Sra. Levin agregó: "Ella siempre recordaba eso y la molestaba, la hacía sentir muy inestable".
