Kate Middleton, hace unos días, deslumbró enfundada en un simbólico abrigo largo rojo al pie del campo de rugby, ahora en su visita al Centro Infantil Colham Manor, ubicado en el pueblo británico de Uxbridge, vuelve a impactar con un estilismo monocolor perfecto para la temporada de otoño.
Esta vez, la princesa de Gales lució un abrigo ceñido a la cintura en verde oliva confeccionado en cashmere de la marca londinense Hobbs. Un diseño ideal para sobrevivir a las bajas temperaturas de la época que ha combinado de forma magistral con otras pieza de la misma gama cromática.
Bajo el abrigo, Kate Middleton estrenó un sencillo vestido de corte midi y creado a partir de tejido de punto de canalé en verde manzana. Una pieza atemporal de estructura recta, manga larga y cuello ligeramente alto de la marca Mango, perfecta para el otoño.
Aunque entre su clóset se encuentran piezas exclusivas y trajes de alta costura, la esposa del príncipe William es fan de los estilismos básicos, que junto con sus accesorios logra lucir siempre guapa y estilosa.
En esta ocasión completó su look con un cinturón de piel de cocodrilo con hebilla dorada, que le aportó un toque más sobrio; unos zapatos de tacón de ante de Gianvito Rossi, cartera de mano en piel de cocodrilo de Jimmy Choo, todos en en el mismo todo que su ropa así como unos delicados pendientes colgantes con piedra amarilla de Kiki McDonough.
