Desde hace algunos años surgió una teoría que aseguraba que el príncipe Harry no era hijo del rey Carlos III, sino de James Hewitt, un exescudero de la reina Isabel, por lo que sería obligado por su padre a realizarse una prueba de ADN para desmentir dicho rumor.
Un nuevo escándalo está a punto de estallar en la familia real británica. En los días recientes, el rey Carlos III, quien se convirtió en el nuevo gobernante después de la muerte de la reina Isabel II, habría convocado al príncipe Harry para pedirle que se hiciera la prueba de ADN.
Según nuevos informes, el rey Carlos III está considerando organizar una reunión con el príncipe William, después de las revelaciones sobre la paternidad del príncipe Harry se conozcan. Las discusiones terminarían en lágrimas.
Cabe señalar que la revista Star en su edición de esta semana aseguró que el verdadero padre del príncipe Harry es James Hewitt, un exescudero de la Reina.
Por su parte James Hewitt afirmó haber conocido a Diana en una cena en 1985, un año después del nacimiento de Harry. Sin embargo, un nuevo informe del autor real Nicholas Davies lo cuestiona. Davies afirma que la difunta princesa "fue vista varias veces dentro de la casa de Carlos y Diana en el Palacio de Kensington en 1983", y agregó que la propia Diana no estaba segura de la identidad del padre.
Pero tal parece que el rey Carlos III daría crédito a este testimonio, e incluso tendría la firme intención de convocar una reunión de emergencia a la que asistirían los príncipes Harry y William. El soberano amenazaría con desheredar a su segundo hijo, y en consecuencia a sus hijos, Archie, de 3, y Lilibet, de 15 meses.
"La familia real debe estar 100% segura de que es un hijo legítimo y que su filiación está establecida con respecto a Carlos", dijo una fuente cercana citada por la revista Star. "La reunión probablemente terminará en lágrimas. Ser confrontado con las dudas del hombre que lo crió probablemente ofenderá a Harry".