El príncipe Felipe, esposo de la Reina Isabel, no soportaba estar en el mismo lugar que Sarah Ferguson, pareja del príncipe Andrés. Hubo muchos momentos incómodos entre ellos pues el Duque de Edimburgo no soportaba estar en el mismo lugar que la mamá de la princesa Eugenia y la princesa Beatriz.
La razón de este distanciamiento fue el escándalo que Sarah Ferguson protagonizó en los noventa. Fue uno de los miembros de la Familia Real más polémicos y que dejó mal parada a toda la institución. En los últimos años se ha normalizado su presencia pero es cierto que por décadas le cerraron las puertas de todos los eventos en el Palacio.
Asistió a la boda del príncipe Harry y Meghan Markle, en la del príncipe William y Kate Middleton no fue invitada. La vimos en los últimos Royal Ascot y en algunos otros eventos. De hecho ella volvió a vivir con el príncipe Andrés aunque están divorciados y se quedó con los amados corgis de la Reina Isabel II después de su muerte pues su hijo se los regaló y la familia decidió regresárselos tras el fallecimiento de la Monarca.
Pero el príncipe Felipe jamás olvidó o pasó por alto el verano de 1992 donde la pasable relación que llevaban se rompió por completo. Sarah Ferguson y el príncipe Andrés se casaron en el año 1986, se decía que la pelirroja era la nuera favorita del príncipe Felipe, mucho más "despierta" y extrovertida que Lady Di.
En 1992 se separó del príncipe Andrés pero no se divorciaron; sin embargo, ella decidió vivir la vida de soltera saliendo con distintos hombres, divirtiéndose y teniendo relaciones fugaces sin cuidarse de la sensacionalista prensa. Pasó lo inevitable, se hicieron públicas imágenes muy íntimas de Sarah Ferguson con John Bryan, su asesor financiero, que le dieron la vuelta al mundo. El hombre le lamía los pies a la polémica pelirroja cuando aún estaba casada.
Cuando las fotografías se publicaron, Sarah Ferguson estaba quedándose en el Castillo de Balmoral y por supuesto que la corrieron con una línea muy marcada donde el esposo de la Reina no quiso convivir más con ella. Si era invitada a un evento, el príncipe Felipe prefería no asistir.
En el año 2010 sucedió otro escándalo que no le ayudó a limar asperezas. Se publicaron imágenes de la madre de la princesa Eugenia recibiendo un maletín con 32 mil euros como anticipo de los 575 mil que le pidió a un periodista para tener una cita con su exesposo.
Sarah Ferguson ha pedido perdón en repetidas ocasiones, de forma pública y privada; sin embargo, este tema al parecer no está completamente cerrado pues algunos miembros de la familia aún sienten un rechazo por ella aunque el príncipe Felipe falleció el 9 de abril de 2021 a los 99 años.