De acuerdo con Valentine Low, el autor del ya famoso libro "Courtiers: The Hidden Power Behind the Crown", la aparente incendiaria temporada 5 de "The Crown" no exagera los escándalos que aquejaron a la familia real en los años noventa.
Uno de ellos fue el divorcio del ahora rey Carlos y la princesa Diana. Ya en problemas que la familia real negaba, el detonante del divorcio fue la entrevista con "Panorama". Low cuenta en un artículo publicado por The Times: "Diana mantuvo la entrevista de Panorama en un secreto muy bien guardado, sin siquiera decirles a sus ayudantes lo que estaba haciendo. Pasaría de contrabando a Bashir al Palacio de Kensington en el maletero del coche de su mayordomo. Cuando la familia real se enteró, no pudieron hacer nada".
Añadió: "El resultado fue una pieza de televisión incendiaria que fue devastadora para Carlos, un shock terrible para sus hijos y, para Diana, un ejercicio de autojustificación que al final no le sirvió de mucho".
De esa entrevista se afianzaron los rumores sobre las infidelidades en la pareja y también surgieron frases célebres para la posteridad. Después de eso, la reina simplemente ya no podía más.
"Poco menos de un mes después, les escribió a Charles y Diana solicitándoles que se divorciaran lo antes posible. Su carta a Diana fue firmada 'con amor, mamá'".
Según el acuerdo de divorcio, concedido en julio de 1996, Diana recibió un acuerdo de suma global de 17 millones de libras esterlinas y 400 mil libras esterlinas al año. Diana perdió su título de Su Alteza Real, pero se anunció que seguiría siendo considerada miembro de la familia real.
Camilla, mientras tanto, fue muy impopular y tuvo que mantener un perfil bajo. En las fiestas de amigos, se veía obligada a usar la puerta trasera y Charles solía esconderse debajo de una manta en el asiento trasero de su automóvil cuando la visitaba.