En la década de los 60, la reina Isabel II se hizo aficionada a las carreras de caballos y participaba en los entrenamientos de sus propios equinos en competición.
Aunque ahora ya no lo hace, su gusto por las carreras sigue vigente y, según cálculos realizados por el periódico The Sun, en los últimos nueve meses, la monarca británica habría ganado más de 600 mil dólares en premios, tras realizar su temporada más exitosa de la historia.
Esto ha conseguido que la reina se encuentre de mejor ánimo, pues ha vivido meses complicados al aislarse en el Palacio de Windsor, debido a la pandemia por el coronavirus, y después por la muerte del duque Felipe de Edimburgo, su esposo durante más de siete décadas.
Con el triunfo de su caballo Fresh Fancy en el hipódromo de Kempton Park, se llevó a la bolsa más de cinco mil dólares. Con ello, la reina Isabel II logró superar su propio récord personal, que estableció en 2019 cuando alcanzó 29 victorias.
La lista de este año incluye 30 primeros puestos en carreras planas y dos en saltos de obstáculos, lo cual seguirá en aumento porque las carreras de la primera de estas modalidades terminarán hasta mediados de octubre.
Será en 2022 cuando Reach For The Moon, otro de sus caballos ejemplares, competirá en el histórico Derby de Epsom y lo hará rodeado de una gran expectativa debido a que coincidirá con las celebraciones del Jubileo Platino (que celebra los 70 años del reinado de Isabel II) y ningún monarca reinante ha ganado la carrera desde Eduardo VII en 1909.