Quizá el cubrebocas ya enfadó a la socialité y decidió imponer moda en la pandemia, así que Kim Kardashian salió a la calle enfundada de piel, literal, de la cabeza a los pies.
Su look impactó a quienes la vieron pasar, el público no podía creerlo, incluso hubo quien rumoró que se cubría porque se había sometido a una cirugía.
Miles de seguidores lo tacharon como un look bizarro, pero logró su cometido, todos hablan de ella, no sólo quienes la vieron caminar así por Nueva York, sino también en el mundo entero, pues es tendencia en las redes sociales.
El vestuario que ha impactado, es un diseño de Demna Gvasalia, director creativo de Balenciaga. El vestuario lo complementan un body de cuero negro, una gabardina del mismo color y textura de Vetements, unas botas largas negras hasta la rodilla y guantes de cuero de Balenciaga. Pero el detalle que más llama la atención es la máscara que forma parte de la gabardina, pues cubre toda su cabeza con piel color negro y cierres plateados en los ojos y boca.
La semana de la moda en Nueva York es para eso, quien no impacta, no es importante, y Kim se llevó la corona.
Un look similar, también de Balenciaga, ya lo había utilizado en la presentación del disco "Donda", de Kanye West.