Megan Fox estuvo de invitada en el programa "Jimmy Kimmel Live!", el que en estos días está a cargo de Arsenio Hall. En conversación con el presentador invitado, la pareja de Machine Gun Kelly relató su viaje con el cantante a Costa Rica donde bebieron ayahuasca.
Una experiencia que la actriz de 35 años vivió "en un ambiente adecuado, con indígenas", en un lugar que es conocido por atender a celebridades que buscan emprender viajes espirituales.
"Realmente estás en medio de la jungla, y no puedes comer después de la una de la tarde. Tienes que caminar una distancia muy larga para conseguir tu agua y no puedes ducharte", relató Megan Fox. "No tenía nada de glamoroso y todo es parte de hacerte vulnerable, así que te rindes a la experiencia", agregó.
La actriz participó de la ceremonia junto a Machine Gun Kelly y otras 20 personas. "Todos se alinean en el borde de la selva, sobre esta extraña valla, van de tres en tres y beben té de limoncillo hasta que, no por su propia voluntad, simplemente vomitan todo fuera de su cuerpo", contó, para luego explicar que "tienes que vomitar una cierta cantidad hasta que te permitan volver con todos los demás, así que es como animar a todos mientras vomitan".
Una experiencia que Megan Fox describió como una instancia de "unión" que te prepara para ir a la ceremonia esa noche", porque la despojó de cualquier vanidad.
Fueron tres noches "increíblemente intensas". "El viaje de todos es diferente, pero en la segunda noche fui al infierno por la eternidad", expuso la actriz, quien aseguró que "simplemente va directo a tu alma y te lleva a la prisión psicológica en la que te encierras".
"Así que es tu propia versión del infierno, y definitivamente estuve allí", sentenció.