La Astrología se encarga de estudiar y cuestionar las características de distintas esferas en el cielo, y entre éstas se encuentra el tan imponente Sol, el núcleo de todo lo que somos. En este caso, vas a conocer qué significa nacer con esta poderosa luminaria en Cáncer, el signo zodiacal representado por el cangrejo, que implica sensibilidad, fraternidad y comprensión.
Pero para entrar en el mágico mundo de los diversos miembros del Zodiaco, primero es importante entender el significado del Sol en la Carta Astral. Este es el motor de nuestro ADN cósmico y el que nos informa aspectos respecto a nuestra forma de ser. Es nuestra identidad, el espacio donde nos sentimos espontáneos y el rasgo psíquico que más predomina.
¿Qué significa ser Sol en Cáncer?
El Sol tarda 365 días en volver a una misma posición, por lo que transita aproximadamente 30 días en cada signo zodiacal. Por defecto, cuando expresamos "soy de tal signo", estamos manifestando que la constelación en la que se ubicaba el Sol en nuestro mes y día de nacimiento es el tan popular "signo solar".
Tener el Sol en Cáncer significa que nuestra personalidad está vinculada a las características de este signo, que con él nos sentimos reconocidos y los demás nos definen también con estas maneras puntuales de relacionarnos. A medida que crecemos vamos incorporando su energía y mostrándonos como el individuo sensible y maternal que define Cáncer.
¿Cuáles son las principales características de Cáncer?
Cáncer es el cuarto signo del Zodiaco, su elemento es el agua y su regente es la Luna, el planeta de su domicilio. También tienen un aspecto dual, de mostrarse a veces retraídos y a veces sociales, dependiendo de sus necesidades emocionales.
Además, pertenece a los signos cardinales, lo cual implica que tiene pensamientos fáciles de cambiar. Suelen ser personas familieras, dramáticas e intuitivas. Del mismo modo, adoran hacerte sentir "en casa", cocinarte algo rico y demostrar su amor a través de recetas de abuelas manteniendo tradiciones familiares.
Los cangrejos también son soñadores y si bien están abiertos a los cambios, los mismos deben ser seguros y no con demasiada prisa. Por este motivo, los tiempos acelerados no son sus mejores amigos y buscan mantenerse serenos, disfrutando del clan familiar y brindando refugio a través de su predisposición cálida y amorosa.
Parecen fríos por fuera, pero realmente son seres repletos de sensibilidad por dentro, y cuentan con un sentido del humor sarcástico y único. Sumado a que son creativos y suelen llevarse muy bien con Virgo y Tauro, pudiendo llegar a generarse una relación fructífera. Por otra parte, también suelen congeniar con Capricornio (su opuesto complementario), Escorpio o Piscis, sus dos compañeros de agua.